Garabatos, frases sueltas, dibujos, avisos, recordatorios… entre mote y mote de un libro de registros parroquiales, entre los nombres de un índice, entre testamentos y ápocas de un libro de protocolos…
Sí, si tienes suerte, aparecen ante tus ojos de cuando en cuando pequeños tesoros que rompen las estrictas normas de estos libros.
Aquí, presumiblemente Matías Hurtado jugó con las palabras…

(Murcia, 1653)
En este otro fragmento, al pie de un registro de matrimonio, alguien (probablemente el propio párroco) disfrutó dibujando ¿un barquito?

(Murcia, 1647)
En este caso, el párroco aprovechó una página en blanco para diseñar esta curiosa forma en cuyo interior anotó un par de frases bíblicas «Estando puesto Cristo en sus tormentos vuelve a mirar a Pedro que le niega» … «para reparar las sillas formó luego Dios a Adán y a la mujer que lo son»…

(Jorquera, siglo XVI)